331 págs. – 2004
Tanto la personalidad, polifacética y compleja, del
arzobispo de Toledo don Francisco Antonio de Lorenzana (1722-1804) como sus
numerosas obras pastorales, sociales y culturales están impregnadas del
despotismo ilustrado reinante en el siglo XVIII. El conocimiento de sus
numerosas obras de caridad, de promoción humana, de profundización y difusión
del pensamiento, de las artes y de la cultura, su interés por el glorioso pasado
cristiano de España, por el bien público en sus diferentes manifestaciones, por
el cultivo de las ciencias naturales, exactas e históricas, y sus predicaciones,
sermones e instrucciones pastorales al clero y al pueblo, nos ofrecen una clara
perspectiva para conocerlo y valorarlo en su justa medida.
El Instituto Superior de Estudios Teológicos San Ildefonso
de Toledo, al conmemorar el II Centenario de su muerte, organizó un Ciclo de
Conferencias cuyo contenido ofrece ahora en este libro como homenaje y
reconocimiento a uno de los más importantes arzobispos de la archidiócesis
primada de Toledo.